Francisco Barbosa se despide con críticas y defensa de la institucionalidad en su último día como Fiscal General.

Francisco Barbosa, quien concluyó su mandato este lunes como Fiscal General de la Nación en Colombia, se despidió con mensajes que podrían interpretarse como una última disputa pública con el presidente Gustavo Petro. En su última declaración, Barbosa afirmó que «no será la fuerza, la presión, el abuso ni los ataques» los que permitirán que en Colombia «fluyan las grandes decisiones». En respuesta a la narrativa del presidente Petro sobre una supuesta «ruptura institucional», Barbosa sostuvo que Colombia «no es un país de rupturas institucionales».

Barbosa defendió su gestión al frente de la Fiscalía, destacando que fue de “la institucionalidad, no de la confrontación, ni de la polarización». En medio de pullas, alertó sobre los riesgos de la polarización y enfatizó que Colombia es un país de instituciones y «de gente laboriosa y democrática», no un país de golpes ni de rupturas institucionales. Barbosa ha protagonizado controversias durante su mandato, desafiando públicamente al presidente Petro y desconociéndolo como representante de la institucionalidad colombiana.

El saliente Fiscal hizo un balance de su gestión, destacando logros en la persecución del narcotráfico y desmantelamiento de organizaciones relacionadas, así como la obtención de más de 3,700 sentencias judiciales contra altos funcionarios del Estado. No obstante, su periodo ha sido problemático y ha generado críticas en cuanto a la percepción de falta de independencia y la utilización de la función pública para aspiraciones políticas personales.

La vicefiscal Martha Mancera asumirá en calidad de encargada este martes, mientras la Corte Suprema de Justicia elige al próximo Fiscal General de la Nación.