Daniel Briceño pone en duda el nombramiento de la nueva interventora de la Nueva EPS

El concejal bogotano Daniel Briceño puso en duda la idoneidad de Gloria Libia Polanía Aguillón, recién nombrada como interventora de la Nueva EPS, la entidad aseguradora más grande del país con más de 11 millones de afiliados. Según un comunicado publicado en su cuenta de X, Polanía no habría aprobado el examen de conocimientos requerido para ejercer ese cargo.

La Superintendencia Nacional de Salud designó a Polanía Aguillón, quien cuenta con 33 años de experiencia en el sector, para sustituir a Bernardo Camacho, después de ocho meses de intervención y avances en auditorías y estabilización operativa.

Sin embargo, Briceño cuestiona que su puntaje en la prueba de la Universidad Nacional —obligatoria en el proceso RILCO (Registro de Interventores, Liquidadores y Contralores)— fue de 54.62, por debajo del umbral mínimo de 60 requerido.

Este señalamiento refleja un debate más amplio sobre la transparencia y exigencia técnica en nombramientos clave de salud pública. Estudios previos muestran que solo una fracción de interventores designados han pasado por el registro RILCO, lo que pone en tela de juicio el rigor del proceso.

Alertas fiscales de la Contraloría sobre EPS

Además, la Contraloría General de la República, en respuesta a denuncias similares, confirmó “graves irregularidades fiscales” en la Nueva EPS, señalando más de $15 billones en anticipos no legalizados —una señal de alarma sobre la gestión de los recursos públicos en la entidad.

La controversia abre un debate sobre la necesidad de reforzar la meritocracia y la transparencia en designaciones institucionales, especialmente en entes que manejan recursos millonarios y servicios esenciales. En este contexto, la credibilidad de la intervención depende tanto de la experiencia de sus líderes como del cumplimiento estricto de los requerimientos técnicos.

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